lunes, 19 de septiembre de 2016

Camisetas quitamiedos. Nuevo descubrimiento



 
A veces, gracias a sorteos súper chulos como el que organizó en su día en Facebook Planeta Mamy descubres marcas molonas.


En mi caso tuve la suerte de ser la afortunada y poder conseguir unas camisetas quitamiedos para los peques de WonderMami.

Fotos cogidas de www.planetamamy.com





Para empezar, he de matizar que se sorteaba una camiseta de adulto y una quitamiedos para niño, pero en ese momento, la mejor amiga de mi hija estaba muy malita y al ser la ganadora, pedí cambiar la de adulto por otra quitamiedos y, aunque era de más importe, la dueña de la empresa, Sarai, no dudó en cambiármela de forma gratuita.

¿Y qué os cuento yo de estas camisetas?.

Primero, que es una empresa gallega, asentada en Vigo.

Segundo, que la mujer que lo regenta es un auténtico amor, y que te asesora un montón con las tallas o lo que necesites.  Y os aseguro que es muy honrada.

En mi caso, las niñas tienen 20 meses y me aconsejó igualmente coger la talla 3-4 años para que las enanas las pudieran disfrutar más tiempo. Y lo hubiese tenido más fácil diciéndome que cogiese su talla actual para así poder sacar más beneficio próximo, pero no lo hizo, a pesar de que a mi me quedaron a coste cero.



No os voy a engañar, las camisetas quitamiedos no son baratas. Cuestan 25€. Ahora bien, son una auténtica pasada. El género es material súper suave, y el fluorescente es de vida útil muy larga.

Además, la presentación de las camisetas es una muy buena. Te manda cada una en un paquete súper original.




¿Sería un producto que comprase así por que sí?. No, sin duda. Lo compraría por dos motivos, y principalmente el segundo.

1. Porque tenga un hijo miedoso y como método de apoyo para que pueda acompañarle a la hora de dormir y si despierta en mitad de la noche se sienta más protegido.

2. Como súper regalo de cumpleaños o Navidad.


De hecho, ya tengo pensado regalarla estas navidades, porque creo que puede ser algo muy exclusivo y molón, que no encuentras en cualquier parte.

Recuerdo cuando era pequeña, que mi prima tenía un pijama fluorescente de la Pantera Rosa, y, cuando dormíamos juntas, no paraba de darle el coñazo para poder ver la Pantera iluminada, y así pasábamos las noches hasta que nos dormíamos. 

Así que no es algo actual, porque hace unos cuantos añazos ya existía, pero ni en aquel momento lo vi en ninguna otra parte ni a día de hoy conozco ningún otro sitio que lo distribuya así que, como regalo original, lo es, sin duda.

Tiene camisetas premamá con mensajes monísimos, bodys para los churumbeles, parte de decoración con vinilos, tazas, cojines, cuadros... uffff. Me pondría morada comprando.

Echad un vistazo a Wondermami, que no os va a dejar indiferentes y ya de gastar, darle beneficio a una empresa de la tierra, ¿no?.

miércoles, 14 de septiembre de 2016

El Antipost: ¡Estoy hasta los ovarios!

Escribo este post porque... ¡ya no puedo más!.

Estoy hasta las soberanas narices de que nos tomen el pelo. Seguro que vosotras y vosotros también os habréis dado cuenta.

Las bloggers intentamos publicar post, con más o menos éxito independientemente de lo conocidas que seamos. Léase mi mismo caso. Intento darlo todo aunque me lean 200 o 2000 personas, dependiendo del post. Pero no le tomo el pelo a nadie.

Está claro que a base de escribir te van conociendo y llega un momento que eres tan conocida que igual te leen en vez de 2000 personas, (cosa que me fascina a día de hoy) 200.000 lectoras y lectores.

Y en ese momento, las marcas se ponen en contacto contigo para buscar publicidad a través tuyo, lo cual es verdaderamente satisfactorio porque valoran tu trayectoria y te ven como un medio para dar a conocer sus productos por ejemplo, o simplemente para publicitarlos. 

Y en ese momento, también, es cuando realmente la cagan el 90% de las bloggers porque pierden la calidad de su blog y escriben, perdón por la palabra.... Verdaderas gilipolleces

Lo siento, no hay otra forma de decirlo. Es que me da la impresión de que muchas nos toman el pelo. Así, sin más. 

Que, sí, pueden hacer post patrocinados. A las mamás recientes, expertas o futuras mamás muchas veces nos ayudan a conocer productos y a tomar decisiones, no es nada malo que se hagan post de las marcas. 

Lo malo es cuando pierden su esencia o simplemente ya no dicen nada.

Creo que la mejor manera de explicarlo de manera clara es ejemplificarlo.

Mirad:





En este caso nos ofrecen un post de cómo marcar las cosas para la guarde, que realmente, tampoco te explica cómo, sino, por qué. Pero claro, es que somos tontos y no sabemos por qué tenemos que marcar la ropa para la guarde.... Lo primero porque ya te lo dice la propia guarde, para no perder las cosas de tus hijos. 

¿Y a qué viene este post? Pues a que la marca o le ha dado dinero o material a cambio de publicidad y aún encima le da más material para un sorteo, pero... ¿de verdad nos pueden tomar el pelo con este post?. ¡Cúrratelo un poco!.

Aquí tenemos otro blog en decadencia. Si leéis a esta chica en sus comienzos, os puede gustar su blog. Os habla de sus experiencias y de lo que va aprendiendo. Hoy en día es un blog de publicidad única y exclusivamente.




Aquí, esta mujer nos dice por qué esta silla le ha fascinado. ¡Venga hombre!. Pues porque te la han regalado, está más claro que el agua. Sólo me está ofreciendo en su post unas pocas características del producto y muchas fotos del mismo. Eso lo hace una tienda. Y es que si quieres saberlo, esta misma silla te la ofrecen BebeConfort o Maxicossi. Y lo peor es que le ha cambiado el nombre a su web y ahora se llama "palabra de madre". jajajajaja. Tenía que llamarse "palabra de dinerito".

Porque yo no digo que no se escriban post patrocinados, porque si le dedicas tiempo y te lo trabajas es normal que te den algo a cambio y tampoco está mal que nos enseñen productos que nos pueden ayudar o facilitar la vida o marcas nuevas que igual se convierten en el amor de nuestra vida, pero luego está el interés con el que quieras hacerlo y ahí es cuando yo creo que nos toman el pelo.

Ahora os pongo el ejemplo contrario. Este post es, creo yo, patrocinado o le habrán pagado de alguna manera. Es tan sutil, que apenas se nota, podéis verlo aquí.



Entiendo que esta mujer no ha perdido esa esencia de su blog. Y, como yo sé lo que cuesta escribir en muchas ocasiones, probablemente ha tenido que pasar horas sentada estrujándose los sesos para hacer un post así. ¡Leñe, que quiero ver Star Wars!. Esta es la gran diferencia. 

En resumen, que estoy hasta los ovarios de leer post que son un amasijo de publicidad barata y poco pensada.

Bueno, y otros que me tienen soberanamente cansada son los post de vuelta al cole... Uffff. Porque incluso esos los hay pagados... Pero de eso hablaremos otro día.






martes, 13 de septiembre de 2016

Mi pequeña Ía

Mi pequeña gran Ía.

Te escribo esto para que lo leas cuando seas mayor.

Para que lo leas cuando te enfades con tu madre o tengas esas crisis existenciales que todos hemos pasado.

Para que lo leas cuando de tu boca salga ese "Yo no pedí nacer".

Nunca vi tanto sacrificio, tanta paciencia y tal sonrisa a pesar de estar destrozada por dentro como fue el caso de tu madre. Y es que, cada día la admiro más.

Llegaste a Urgencias con medio cuerpo en otra vida ya. 

Te ingresaron en la UCI pensando que te ibas en cualquier momento durante los tres primeros días.


Foto de La Voz de Galicia
Durante esos días, ella no salía de tu lado, sólo te miraba y te sonreía y te cogía en brazos cuando la ayudaban a apartar todos esos cables que te rodeaban.

Se obligaba a comer más durante todos esos días de cautiverio para estar fuerte porque a pesar de tener un nudo en la garganta de manera permanente, no te podía fallar debilitándose ella.

Tuviste una enfermedad muy grave, una Encefalitis por Herpes que gracias a que cogieron a tiempo, no te dejó secuelas.

Una semana más tarde decidieron subirte a planta porque parte de tu recuperación pasaba porque te pudieses mover dentro de una habitación "a tu aire", pero con mucho cuidado porque cualquier virus en el ambiente era peligroso para ti porque tu sistema inmune estaba destrozado.

Tu madre tuvo que luchar, suplicar y llorar porque por falta de camas (nuestro sistema sanitario, por ahorrar personal, cierra plantas y camas en verano) te pusieron un compañero de habitación.




Debido a tu encefalitis, tenías una irritabilidad máxima y todo te hacía llorar así que el paso de una mosca era insoportable para ti, cuánto más un compañero que no conocías, junto sus padres y visitas. Pero tu madre iba más allá pensando en los virus que los podrían acompañar y que podrían perjudicarte así que ahí se puso seria. 

Suplicó, rogó, lloró, y explicó a todo el que se ponía frente a ella el porqué su hija no podía tener compañeros de habitación.

Ahí, la pediatra que al principio le explicó que su hija no podía tener ni visitas por lo grave de su situación, le dijo que la infecciosa era su hija, y que mientras le pusiesen niño sanos (sólo de operaciones tipo apendicitis) el peligro lo tenían los otros niños...

Hasta aquí llega la sanidad pública. Niña contagiosa y aún así exponen a niños sanos... ¡Increíble!.

Pero se llevaron a ese niño, suponemos a operar, y metieron a otra niña, para operar también de vegetaciones. 

En cuanto tu padre le dijo a los padres de la niña lo contagiosa y peligrosa que eras para su salud, salieron pitando, jajajaja. Y es que, no era justo para nadie.

Y al día siguiente, tu madre lo consiguió. Habló y lloró, delante de MIR, celadores, auxiliares, enfermeras y médicos sin importarle lo que pensaran de ella porque en su cerebro sólo estabas tú. Y al final, lo consiguió. Logró que en tu puerta pusiesen un cartel de "infeccioso" y que no te pusiesen ningún compañero más.


Este era el cartel de la habitación


Según te ibas recuperando más y más, tu capacidad para estar encerrada iba mermándose también. Y es que, es normal, cómo le pides a un bebé de 20 meses que se esté quietito y se porte bien. Lo que necesitan es quemar toda esa energía que tienen. Y tú no podías en esa habitación.

Cuando ya faltaban sólo dos días para irte, llegaste a desquiciarte por la desesperación de estar de dos en dos horas quieta para el momento de la medicación y porque tenían que ponerte vías nuevas porque las anteriores se tupían. Despertabas con pesadillas del dolor por las vías, de la desesperación por las punciones y ahí estaba tu madre siempre, y también tu padre.

Así que no, quizás no pediste nacer, pero tu madre siempre está ahí por y para ti. Porque eres su mundo y lo que la hace levantarse cada mañana.

Así que, para esos días de frustración en los que pienses que tu madre no te comprende, da gracias de tener una madre que no te ha fallado nunca. Porque si en lo más difícil ella puede, lo fácil está chupado.

Y el resto de madres, como yo, o incluso tú, cuando seas madre si así lo deseas, estoy segura de que haríamos lo mismo, porque nuestro motor, sois vosotros, nuestros grandes pequeños, porque siempre seréis nuestros pequeños.


domingo, 21 de agosto de 2016

Soy Feminista, ¿y qué?

Hasta no hace mucho, simplemente era una defensora de los derechos de la mujer. 

Como mujer sigo sin entender porqué voy a cobrar menos sólo por mi sexo, o porqué me van a juzgar por estar en edad fértil o por quedarme embarazada.

Pero nunca me definí como feminista porque lo entendía como un radicalismo, como lo contrario de machismo y si el machismo no es bueno, el feminismo tampoco lo podía ser.

He ahí el error y mi ignorancia. Una gran amiga me abrió los ojos.

¿Cuánta gente está equivocada con el concepto del feminismo?.






¿Cuántos se han sorprendido?. Espero que no muchos. Aunque, lo importante no es cómo lo llamemos sino que tengamos claro que cualquier discriminación negativa hacia la mujer (y hacia el hombre) es indefendible e injustificable.

Pero todo empieza desde pequeños. La cama la tiene que hacer un niño y una niña al igual que recoger la mesa, fregar... 

¿Y los juguetes? ¿Qué me decís de ellos?. Mi hija últimamente tiene mucho apego a una sillita de paseo y babypelón con los que va a todas partes, pero antes era una pelota de fútbol y era lo que hacía a todas horas, chutar el balón.



Me he encontrado a mujeres que me han dicho que les encanta la muñeca de mi hija, pero claro, ellas no la pudieron comprar porque tuvieron niños... ¿Entonces mi hija no debería jugar con los camiones que tiene en casa?. Ella escoge sus juguetes, no yo. Os lo puedo asegurar.

Pero también es importante que hagamos entender que no por ser niñas, como es en el caso de la mía, van a ser princesas. Mi hija no es una princesa, es una niña, y punto. Ni tampoco es la más guapa. Será la más guapa para los suyos, porque es nuestra hija, sobrina, nieta... 

Queremos igualdad, ¿verdad?. Pues empecemos en casa, con nuestros hijos e hijas. Dejemos que decidan con qué quieren jugar y no hagamos distinciones en nada porque el rosa lo puede llevar cualquier sexo, porque puede limpiar cualquiera y porque, por algo se empieza.

jueves, 11 de agosto de 2016

Derecho de admisión: Prohibidos Niños

Cuando no tenía hijos y en una cafetería un niño gritaba, reconozco que miraba hacia donde estuviese, digamos "raro".

¡Cómo han cambiado las cosas!.

Hoy en día es mi hija la que grita emocionada por ahí mientras corre dándolo todo. Y me produce satisfacción verla así, simplemente feliz.

Esta semana pasada fui con una amiga y su hija, que es del mismo tiempo que mi peque, a tomar un café de buena mañana.

Escogimos una cafetería que tenía parte de atrás, para intentar no molestar mucho.

foto: Mamás Viajeras

Pues allá que las enanas se lanzaron a recorrer medio pasillo (en ese lateral no había clientes) gritando mientras se perseguían la una a la otra.

Te pones colorada porque no las puedes amordazar y con 19 meses tampoco entienden el "no chilles" cuando están tan exaltadas. Y tienes miedo de que a alguien le pueda parecer mal, aunque las peques no están en una zona donde haya gente (si la hay a dos metros), ni empujan ni molestan a nadie físicamente, sólo gritan.

Cuando levanté la mirada, vi al dueño de la cafetería con cara de pocos amigos. Lo conocía de antes y siempre suele sonreír. Deduje rápidamente que no le estaba gustando ni un poquito el tema.

Lo comenté con mi amiga y decidimos terminar los cafés e irnos. Entre medias, otro par de gritos ahogados de las peques y el dueño del bar ya empezó a resoplar.

No volveremos a ese sitio, eso es seguro.

Pero me hace plantearme cosas como... ¿Debería no ir a una cafetería mientras mi hija pueda resultar molesta a alguien?. Que no se me malinterprete, me refiero a mientras no pueda hacerle comprender que no puede chillar de pura felicidad porque pueda perjudicar los tímpanos de alguna persona.

Entiendo que si estuviese corriendo entre las mesas con gente y molestándolos o echándose al paso de los camareros, eso sí que me parece que no lo debo consentir, y no lo hace, pero... 

¿Sólo puedo ir a cafeterías con zonas infantiles?. ¿Me queda vetado el resto?. ¿Soy mala persona por dejar que mi hija se divierta aunque grite un poco?. ¿Son los demás los que deben asumir que los niños son niños?.



¿Cuál es el término medio?. ¿Ese punto de inflexión que no debo cruzar para no romper la armonía del universo?...

Qué difícil lo hacemos todo, y que intolerantes somos con los niños (y de rebote con los padrastrones como yo) antes de tener hijos propios y de entender que son la naturalidad en persona. Que ríen, lloran, cagan y duermen cuando y como quieren porque, simplemente, pueden.

Porque en nuestra conciencia está saber dónde los podemos o no llevar. Porque no se me ocurre meterla en un café pub a las 9 de la noche, ni tampoco en un restaurante donde se habla en susurros. Pero también sé que hay en restaurantes y cafeterías donde no puedes escuchar ni tus pensamientos y quiero pensar, que mi hija ahí no está de sobra. 

Y que si la llevo a un bar que no está hasta los topes y mi hija ríe y grita, ver que la gente se gira y sonríe, para mí ya es lo normal y no lo que me pasó en este local.

sábado, 6 de agosto de 2016

Mi niño no me come

Sí, os sonará este título del libro de Carlos González.  Y es que en relación a esto va el post.



Me levanté esta mañana tan ricamente y desayunando leo este artículo de Carlos González que alguien compartió en Facebook y lo que se me pasa por la cabeza es:

1.- La teoría es chulísima. Me encanta la forma de pensar de este hombre pero difiero profundamente en varios aspectos como:

  • Qué pasada que coman trozos desde que empiezan con la alimentación complementaria, pero nunca comerán tan completo como con los purés, que es cuando le das todos los alimentos y comen de lo más equilibrado. Y sí, antaño no había batidoras, pero había tenedores y machacaban la comida. Yo he preguntado y nadie recuerda eso de dar trocitos para empezar a comer.
  • Que los niños no comen de todo cuando empiezan con sólido, está claro. Cuando ya tienen sus papilas gustativas más operativas, pues como nosotros, habrá cosas que le gusten y otras que aborrezcan.
  • Que no nos preocupemos si nuestros niños no comen... ¡JA JA JA!. Señor Carlos, mire usted, me gustaría verle a usted y a su mujer con un niño que se alimenta con dos mordiscos de "algo", y sólo con eso de manera exclusiva durante unas tres o cuatro semanas y después volvemos a hablar. Me está diciendo que si mi hija decide dejar de comer, no debo intentar que coma porque ella sabe cuánto necesita... ¿Qué madre se queda tan pichi si su hijo se queda sin comer o come una auténtica minucia?. Que con el verano comen menos, pase, pero siempre intentaremos que coma un pelín más, que para eso somos sus madres.

foto: http://enfamilia.aeped.es


2.- Las abuelas no son tan propensas a embutir... Te animo a venir a Galicia donde el "no me comes nada" o el "come niño come" están a la orden del día en las abuelas.

3.- Como el niño no quiere pescado, desde los dos años hasta la adolescencia, aproximadamente, no volveré a preocuparme si mi hijo no come pescado. 
¿Debo consentir que mi hija se alimente de 4 cosas de manera exclusiva por mucho que este pediatra, que insisto, me encanta, me diga que los niños de esta edad es normal que no coman de todo?. 

El resumen de todo esto es, que si mi hija no come, me preocuparé, haré lo impensable para que coma y no, no puedo relajarme y pensar que ella sabe cuánto necesita, porque si me dice que no quiere más, es que no quiere más, pero seguro que si le pongo una bolsa de gusanitos delante, se la come como si no hubiese un mañana

Así que, me gusta este hombre, me gusta su filosofía, pero en muchos aspectos, no la veo muy factible.

martes, 2 de agosto de 2016

¡¡¡¡SORTEO!!!!

No se si ya os he dado las gracias a los algo más de 200 seguidores que me apoyáis, dais Me Gustas, comentáis y compartís mis publicaciones.


Y una manera de intentar compensaros es hacer un pequeño sorteo.

Un negocio ourensano nos ha donado este reloj para uno de vosotros:



¿Qué tenéis que hacer para participar?.

1.- Dar Me gusta a mi página de Facebook: Ourensana en Apuros

Tiene que aparecer así:




2.- Compartir el post del sorteo públicamente en Facebook (ojo, fijaos bien, si lo compartís sólo entre amigos no valdrá).

3.- Comentar el post del sorteo etiquetando a un amig@.

¿Cómo y cuándo se realizará el sorteo?

  • El sorteo se inicia hoy, día 2 de agosto de 2016 y termina el día 10 de agosto de 2016 a las 23:59 horas.
  • Entre el día 11 y 12 de agosto de 2016 realizaré el sorteo mediante sortea2 y anunciaré el ganador en este post. 
  • El ganador tiene dos días para ponerse en contacto conmigo mediante Facebook. En caso de que no apareciese, volvería a realizar el sorteo mediante el mismo procedimiento y criterios.
  • Podéis participar todos aquellos residentes en la Península.
  • Si el ganador reside en la provincia de Ourense, se entregará el reloj en mano.
  • Si el ganador reside en cualquier otro punto de la península se le enviará el reloj por Correos.
¡¡¡SORTEO CERRADO!!!

Ya tenemos ganador. Por favor, ponte en contacto conmigo mediante privado.
Y gracias a todos por participar.