domingo, 19 de junio de 2016

Fin de semana con susto incluido - Espasmo del Sollozo

Este fin de semana tuvimos un susto bastante grande.

Aún eran las cinco de la tarde del sábado y como hacía calor, estábamos esperando un ratito más para salir de casa a jugar.

¿Y qué hacíamos? Pues correr en casa como locos jugando. La Patatita iba y venía corriendo de una habitación a otra. Aún tropieza de vez en cuando y, como no gateó, al caer aunque apoya las manos no tiene suficiente fuerza en los brazos y siempre acaba dándose con la frente en el suelo.



Pues más o menos fue eso lo que pasó. Salió corriendo y ya escuchamos el golpe de su frente contra el suelo, y silencio total.

Fui corriendo y me la encontré aún estampada en el suelo.

No sé si habréis escuchado alguna vez que el silencio que precede al llanto justo después de un golpe es directamente proporcional al dolor que les supone dicho golpe. Lo que viene siendo que están llenando los pulmones de aire para quejarse mucho más alto y fuerte si cabe.

Y eso es lo que debería haberle pasado a mi pequeña el sábado, pero en vez de eso, cuando la cogí en brazos, me encontré con su boca casi desencajada de intentar coger aire del dolor o del susto que se llevó (nunca lo sabré) y, acto seguido, se desmayó en mis brazos.

Supongo que en este momento estaréis con los pelos de punta pensando en el mal trago. Pues sí, fue horrible. Tener a mi hija desmayada entre mis brazos sin saber si fue por el golpe o por la falta de aire.... Creo que no he llorado tanto en toda mi vida.

El santo y yo ya salíamos corriendo con la niña por la puerta de casa cuando reaccionó, fueron segundos, no sabría decir cuantos, la agité suavemente porque al tener un golpe y no saber bien qué había pasado tampoco quería arriesgarme, y despertó.

Nos fuimos corriendo a la residencia, que tenemos a tres minutos de casa, gracias al cielo y según estábamos llegando nos dimos cuenta de que no habíamos cogido nada, ni agua, ni un pañal, ni el chupete de la peque... ¡nada!. Así que el Santo volvió a casa mientras yo entraba corriendo con ella a urgencias pediátricas.



Nada más llegué y les expliqué lo que pasó me hicieron pasar con la niña a la sala de observación (creo que más por mí que por ella porque no podía dejar de llorar) mientras una de las enfermeras me explicó qué le había sucedido a mi hija. Espasmo del sollozo, se llama. Justamente a su nieta le pasaba lo mismo, por lo que aún empatizaba mucho más conmigo. Se portaron súper bien con nosotras. Me tranquilizaron todas diciendo que es una situación horrible para los padres y miraron a la Patatita de arriba a abajo. Le intentaron dar una piruleta, un chupete (pero como era de los de recién nacido no lo quiso), azúcar... todo lo que tenían a mano para que se tranquilizase, mientras el Santo no llegaba.

Cuando la atendió la pediatra nos confirmó el diagnóstico de las enfermeras, Espasmo del Sollozo. ¿En qué consiste?, en el caso de mi hija, que cuando fue a llorar no fue capaz de coger aire y por eso se desmayó. Ya desde muy bebé cuando lloraba mucho (sobretodo en las revisiones con el anterior pediatra) se quedaba sin aire, pero nunca había pasado esto. Pueden llegar a ponerse amoratados, los labios azules...

Os lo cuento por si alguna vez (ojalá nunca os pase) os veis en la misma situación.

¿Qué hacer? Mantener la calma (es muy muy muy difícil), no sabría decir si nosotros lo hicimos. No recuerdo mucho del momento. Supongo que es memoria selectiva. Si llegamos antes de que se desmaye, cuando vemos que les falta el aire, zarandearlos, mojarlos, gritarles, intentar que reaccionen de alguna forma. Si se desmaya, ponerlos tumbados de lado, en posición de seguridad. Y siempre llevarlos a que los vea un médico después.

Aunque a mi hija la vieron bien me han dicho que pasadas 48 horas debía volverla a ver su pediatra para ver su evolución. Al salir de la residencia mi hija ya era una niña feliz de nuevo y era como si no hubiese sucedido nada (salvo por el chichón en su frente).

Espero que este post os sirva para saber o conocer este tipo de reacción. El mal trago no lo quita nadie así que no hay ningún consejo que pueda daros al respecto. En este Link tenéis más información sobre esta putada este acto supuestamente voluntario de los niños.

Por último, dar las gracias al personal sanitario, que como siempre, en urgencias pediátricas, ha sido un 10 en atención, de lo mejor que te puedas encontrar.

3 comentarios:

  1. Se pasa realmente mal. Esa "nieta" de la que hablas es mi hija... lo supe tan pronto lo leí. El remedio más a mano es soplarle en la carita pero si no funciona, como es nuestro caso, echarle agua también funciona. La mía aun lo hizo hoy... son "aventuras" que nos pone la vida..

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo probé soplarle en la cara y no funcionó. Hoy, gracias a todos vuestros comentarios en facebook y el tuyo aquí, tengo mucha más información de cómo actuar. Que sepas que me ha emocionado que escribas, y dale un beso gigante a tu madre de mi parte.

      Eliminar
    2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

      Eliminar